Tras 12 años en prisión, el exjugador de fútbol Palmer vuelve a casa para rehacer su vida. Mientras se adapta a su nueva realidad, entabla una amistad con un niño abandonado, pero su pasado le persigue y amenaza con destruir su nueva familia.

Robert Langdon descubre la prueba de la reaparición de una antigua hermandad secreta conocida como los Illuminati: la más poderosa organización secreta en la historia, que a su vez también se enfrenta a una amenaza que hace que peligre su existencia: la Iglesia Católica. Cuando Langdon se entera de que los Illuminati conspiran en contra de la Iglesia intentando detonar una bomba de antimateria, él se dirige a Roma, donde une fuerzas con Vittoria Vetra.

Ray Breslin un experto en seguridad carcelaria, se enfrenta a su mayor reto: escapar de la prisión que él mismo ha diseñado. En la cárcel conoce al enigmático Church un tipo que se ha ganado el respeto de todos los presos por ser capaz de mantenerlos cuerdos en las horas más oscuras.

Los Warren investigan un asesinato que puede estar relacionado con una posesión demoníaca.

En el día de su ejecución programada, un asesino en serie condenado recibe una evaluación psiquiátrica durante la cual afirma ser un demonio, y además asegura que antes de que termine su tiempo, el psiquiatra cometerá tres asesinatos propios.

Cuando el campesino austriaco Franz Jägerstätter, objetor de conciencia a la lucha en la Segunda Guerra Mundial, se enfrenta a la amenaza de ser ejecutado por traición, es su fe inquebrantable y su amor por su familia lo que mantiene vivo su espíritu.

En 1561, María, Reina de Escocia, de diecinueve años de edad, católica y reina de Escocia, regresa a su país de origen desde Francia después de la muerte de su esposo, Francisco II de Francia, para tomar su trono, donde es recibida por su medio hermano, James Stewart, primer conde de Moray. En la vecina Inglaterra, su prima, Isabel I de Inglaterra, de veintiocho años, es la reina protestante de Inglaterra, soltera, sin hijos y amenazada por la posible reclamación de María a su trono. María pronto choca con el clérigo Juan Knox y lo despide de su corte. Knox es un protestante y líder de la Reforma Escocesa, y percibe a María como una amenaza para la supremacía protestante del reino.